Sin duda, la década de los años 60 fue crucial en el desarrollo del turismo en España. Fue en este periodo cuando se constituyó la primera estructura administrativa turística en España. Igualmente se aprobaron las primeras leyes que ordenaron y regularon el sector, se organizó la oferta turística a través de la Ley de zonas y centros de interés turístico y se impulsaron las primeras acciones comerciales internacionales bajo el lema "Spain is different". Tres palabras que cambiarían para siempre la imagen de España.

Durante los años cincuenta, "visit Spain" fue el primer eslogan utilizado por el Gobierno en los primeros intentos de atraer turistas. Los carteles de esta campaña, en gran parte obra del ilustrador Josep Morell, recurrieron a los tópicos como las flamencas, los toros y la Semana Santa, pero también se empezaron a utilizar conceptos más modernos como el turismo de sol y playa.

Algunos de los carteles de las primeras campañas de promoción Turística del Estado Español durante los años 50 obra del ilustrador catalán formado en Sevilla Josep Morell.

La rápida apertura de España al turismo y la creciente actividad empresarial del sector, propició la necesidad  de disponer de una adecuada formación profesional que diese respuestas a la creciente demanda de puestos de trabajo cualificados. Así, los primeros planes de estudio recogieron las experiencias de otros países con tradición turística y las primeras iniciativas propias a través de las Escuelas Sindicales de Hostelería y los primeros centros privados de formación turística.

La Escuela de Turismo Costa del Sol a finales de los años 60.

En 1962, Fraga Iribarne, al frente del Ministerio de Información y Turismo, sustituyó la Dirección General por una Secretaría de Turismo. Se trataba de un órgano independiente encargado de organizar el turismo emergente. Dentro de las múltiples acciones propagandísticas  emprendidas, se empezó a publicar el Noticiario de Turismo, que tratando temas de información y coyuntura turística, también sirvió para el fomento y la promoción de aquellos recursos con potencial atractivo para el turismo.

El precio de suscripción al noticiario era de 400 pesetas y a los alumnos de las escuelas de turismo y hostelería se les concedía una bonificación del 50%.